Los puertos de Málaga y Algeciras han diversificado sus líneas de negocio para desarrollar un modelo de comunidad portuaria sostenible a largo plazo. Este ecosistema empresarial apuesta por desarrollarse como una entidad facilitadora del comercio internacional, prestando servicios logísticos de valor añadido que contribuyen a la internacionalización de las empresas ubicadas en su zona de influencia. Así, aprovechan las sinergias surgidas para establecer un marco de colaboración que beneficie la actividad portuaria, la industria, la logística y la distribución, fomentando la transferencia de conocimiento para incentivar la colaboración público-privada.
El Área Logística de Antequera se constituye como la base complementaria de estos puertos no sólo por su posición geográfica, sino por ser un nodo intermodal prioritario de la Red Transeuropea de Transporte (RTE-T) y sus interconexiones con los corredores europeos. Unas condiciones que se unen a la flexibilidad y tamaño de las parcelas que ofrece y las nuevas tecnologías que aplica en las instalaciones.
Los puertos de Málaga y de la Bahía de Algeciras cuentan con conexiones ferroviarias para mercancías y unas instalaciones plenamente operativas para llevar a cabo este tipo de tráfico y prestar servicios intermodales que promueven el desarrollo de una actividad más sostenible. “La unión de ambos puertos con el Puerto Seco de Antequera permite poner en valor la capacidad de la región para conectar territorios y podrá posicionar Andalucía como referente en el comercio internacional”, han explicado desde el Gobierno andaluz.
La ubicación de ambos puertos en el marco del Estrecho de Gibraltar, cuyo enclave es el segundo en tráfico de mercancías a nivel mundial, unido a la ubicación privilegiada del Área Logística de Antequera, han convertido a este enclave y en un polo triangular de atracción para la llegada de empresas logísticas altamente innovadoras. Esto supone una oportunidad para ser la puerta de entrada y salida de mercancías del sur de Europa, dinamizando el entorno socioeconómico de la región.
Los firmantes se han comprometido a potenciar la logística y la conectividad para que estos espacios se puedan desarrollar como el enclave logístico del Sur de Europa. Además, configurarán espacios comunes que favorezcan la integración del conocimiento y la cooperación del sector empresarial y productivo bajo el ecosistema triangular de puerto marítimo y puerto seco. De igual manera, avanzarán en la implantación del Pacto Verde Europeo, estrategia que basa su acción en los principios de sostenibilidad ambiental, social, económica-financiera y de gobernanza; y el fomento de la economía azul.
El acuerdo implica que las empresas e instituciones ubicadas en dichos espacios puedan compartir servicios de I+D+i, realizar actividades conjuntas para desarrollar y mejorar la conectividad, así como de promoción y atracción de inversiones. También podrán incorporarse al listado de empresas y directorio, participar en acciones de dinamización comunes y participar en programas de internacionalización.
El Puerto Seco de Antequera tiene ya desarrollado su primera fase tras una inversión 50 millones de euros gracias a la colaboración público-privada. De hecho, fue el año pasado cuando se inauguró la primera fase de urbanización del área logística, que abarca 102 hectáreas, más la subestación eléctrica.