- El Ministerio de Transportes cierra a las firmas del sector la posibilidad de concurrir a uno de los mayores contratos de este ejercicio
- Tecniberia, patronal del sector, denuncia que se trata de una decisión abusiva e injustificada
- Los concursos de obra pública con un solo licitador se cuadriplican en plena ejecución de fondos europeos
La decisión de la Dirección General de Carreteras del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible de encomendar de forma directa a la pública Ineco, sin concurrencia de empresas privadas, el proyecto de ingeniería para la construcción del puente sobre el Guadalquivir que cerrará la segunda circunvalación de Sevilla, la SE-40, una de las mayores infraestructuras pendientes de desarrollo, cuya obra está valorada en 458 millones de euros, ha provocado una revuelta contra el ministerio de las firmas privadas de ingeniería, que consideran esta adjudicación como injustificada y abusiva.
Los trabajos de ingeniería no suponen más que una parte reducida de ese presupuesto, alrededor de diez millones de euros, lo que continúa constituyendo un supercontrato en este ámbito. «Un proyecto de la envergadura del puente de la SE-40 no debería ser adjudicado a Ineco, sino que por el contrario debería sometido a concurrencia pública para lograr el mejor resultado que el interés público requiere», denuncia el presidente de Tecniberia, la patronal que aglutina a 85 firmas privadas de ingeniería, Joan Franco, en declaraciones a ABC.
La plataforma sostiene que la empresa de ingeniería del Estado «no ha proyectado nunca un puente de esta envergadura» y vaticina que no le va a quedar más remedio que subcontratar la parte fundamental del trabajo «a empresas privadas especialistas en el diseño de puentes que sí tienen experiencia previa en este tipo de obras».
Desde Tecniberia recuerdan que la normativa vigente admite esa adjudicación directa de trabajos a un medio propio, como es el caso de Ineco, en determinadas situaciones, por razones de seguridad nacional, de emergencia o de mayor eficiencia al considerar que no existen operadores alternativos, y que ninguna de ellas concurre en el caso actual, por lo que considera injustificado que el proyecto no se haya abierto a un proceso de concurrencia pública.
Llueve sobre mojado
Las empresas privadas de ingeniería están hartas del abuso de la adjudicación directa a medios propios por parte del Estado. Según los datos que maneja Tecniberia de lo publicado en la plataforma de contratación del sector público, solo en los cuatro primeros meses del año Ineco ha recibido encargos directos de las administraciones públicas por un importe total de 173 millones de euros, incluidas adjudicaciones de 40 millones por parte del gestor estatal de infraestructuras ferroviarias, Adif.
La patronal de las empresas privadas de ingeniería entiende que en los últimos años las administraciones públicas están haciendo un uso abusivo de los medios propios, que está teniendo consecuencias sobre el interés general, la libre competencia y la descapitalización de la administración. «No debemos olvidar que las empresas de ingeniería y las constructoras han sido clave para modernizar la red española de infraestructuras en los últimos 40 años», recuerda Joan Franco.
- Abc
