- Se propone que haya «cautela de control arqueológico de movimientos de tierra» a la hora de realizar las actuaciones
- La Junta adjudica por 3,6 millones de euros la dirección de las obras del subtramo I de la Línea 3 del metro
La Comisión Provincial de Patrimonio, en la sesión celebrada este miércoles, ha informado favorablemente el proyecto constructivo para la contratación de las obras de construcción del Subtramo III (San Lázaro – Macarena) de la Línea 3 del metro de Sevilla. Esta línea del suburbano (Tramo Norte) tiene una longitud de casi ocho kilómetros, cuenta con doble vía subterránea en su mayor parte, una estación en superficie y once estaciones subterráneas.
El citado órgano ha dado cuenta de un total de 21 expedientes de interés para la conservación del patrimonio cultural y artístico, además de dar solución y cumplimiento al gran número de solicitudes y proyectos de ciudadanos particulares, en los que han estado trabajando los técnicos de la Delegación de Turismo, Cultura y Deporte en las últimas semanas, según el orden del día previsto para ello. De los temas examinados 17 corresponden a Sevilla y cuatro a la provincia, concretamente a las localidades de Carmona, Lebrija y Utrera.
En lo que al subtramo de la Línea 3 respecta, comienza en la zona norte de la ciudad, junto a la carretera SE-20 en Pino Montano, y concluye en la zona del Prado de San Sebastián-Huerta de la Salud; en concreto, al inicio de la avenida de la Borbolla. El trazado desarrollado en el proyecto parte del presentado en el Anteproyecto de Alternativas de la Línea 3 de Metro de Sevilla, el cual, en el tramo en cuestión, presenta una única alternativa de trazado subterránea, «sensiblemente por el eje de la avenida Doctor Fedriani y la calle San Juan de Ribera».
En cuanto a la afección al patrimonio histórico, «dado el calado de las obras previstas, así como su recorrido por algunas de las zonas más significativas del casco urbano, desde el comienzo del estudio de esta línea se realizaron los pertinentes estudios arqueológicos, con la finalidad de realizar un diagnóstico y proponer una serie de medidas correctoras que se anticiparan al posible impacto de las obras sobre el substrato arqueológico«.
Dada la indeterminación de la localización de los restos arqueológicos, se propone una «cautela de control arqueológico de movimientos de tierra». Este control arqueológico se realizará durante las fases de retirada de pavimento, desvío de instalaciones de servicio, apertura de zanjas para la ejecución de muretes guía, ejecución de pantallas, y con especial atención a las terreras que se generen como consecuencia de las excavaciones a cielo abierto entre pantallas.
Así pues, Patrimonio propone su informe favorable teniendo en cuenta las cautelas y anotaciones realizadas en el párrafo anterior, «al entender que las actuaciones propuestas son adecuadas para la conservación del patrimonio arqueológico y los inmuebles catalogados BIC y sus entornos«.
- Abc